PRIMERA ESCENA
La mesa está puesta y la familia en pleno espera a que Brigitte sirva la cena de navidad. Al ver la comida, la abuela Hilde propone: – “¿Por qué no cocinar algo distinto?” – “¡Mamá!, Las papas y las salchichas son nuestra tradición. Es lo que comíamos cuando era niña“; – “La tradición no es excusa“, añade Hilde. “Comíamos eso porque tu padre gastaba todo el dinero en alcohol“.
Esta pequeña escena del segundo episodio de la miniserie alemana Visita de navidad (ÜberWeihnachten) nos muestra a
la vida cotidiana luciéndose como uno de los recursos pedagógicos más valiosos
para advertir cómo es que se relaciona una persona consigo misma, con otras y
con su contexto. Qué apasionante darse cuenta de lo mucho que desconocemos
sobre el origen de nuestras tradiciones. Una pregunta elemental como la
de la abuela Hilde, resulta crucial: “¿por qué no cocinar algo distinto?”.
Con ella surge una historia capaz de permitirnos modificar algo que quizás ya
no tiene sentido conservar.
Este es un ejercicio interesante cuando comienza un nuevo año o cuando
queremos reiniciar nuestras vidas: hacer un listado de costumbres y tradiciones
de todo tipo, no solo gastronómicas, sobre todo, de esas que socialmente nos
dicen cómo comportarnos con las personas de otra edad, género, orientación
sexual, condición económica o de otra capacidad funcional. Son infinitas,
también, las tradiciones que tenemos a la hora de amar, odiar o de afrontar
dificultades.
“El primer y gran cambio con este curso ha sido preguntarme todo, darle
lugar a tantas nuevas y posibles respuestas. Esto me ha llevado a vincularme
más libremente y a sentirme así en varias ocasiones”. (Participante –
El TransCurso – Edic.XXIII)
SEGUNDA ESCENA
Dylan tiene 5 años. Solo quiere lanzar con fuerza la pelota contra la pared. Su hermana mayor cree que lo hace porque está enojado con su mamá por haber dejado la ciudad en la que vivían y con ella a sus amigos del cole y a su abuela. Siente que nadie lo escucha y por eso no quiere escuchar a nadie. Un día, Daniel, el vecino, mientras ayuda en la reparación de la casa a la que se han mudado, le hace una pregunta al chico intentando dar conversación: – Qué mata más gente, ¿Los cocos o los tiburones? Transcurrieron muchos días para escuchar su respuesta. Dylan necesitaba indagar primero si Daniel era o no digno de su confianza.
¿Cómo saber si alguien es una persona de fiar? ¿Sabes si tú lo eres? La comunidad de vecinos sabe que Daniel lo es y por eso es un actor clave en el manejo de los problemas y conflictos que allí viven un grupo de jóvenes y también, familias como la de Katie, la madre de Dylan, que responde sola por sus hijos.
Esta segunda escena, tomada de la película inglesa Yo, Daniel Blake, nos acerca al sentido que tiene fortalecer nuestras Habilidades para la Vida y con ellas, esa parte ciudadana que es un determinante social de nuestro bienestar individual. ¿Qué tanto nos interesamos e involucramos en el mejoramiento de la calidad de vida de otras personas que no son parte de la familia o de nuestro pequeño círculo de amistades?
“En mi relación con la comunidad me propuse en este curso plantar
verduras, hortalizas y frutas en el espacio más cercano a la casa. He hablado
con la AAVV y no se oponen, al contrario, nos ayudarán con algunos materiales y
hemos acordado esperar a la primavera ya que van a hacer obras cerca de ese
espacio. Una vecina también se ha animado a hacerlo en el espacio de delante de
su casa”. (Participante – Con Otros Ojos 3a. edición)
TERCERA ESCENA
Esta última escena puede ser la tuya. Anímate a participar en alguno de los cursos que ofrecemos este inicio de año con los cuales podrás aumentar tus capacidades para protagonizar nuevas costumbres en tus relaciones laborales, familiares, ciudadanas y las que tienes contigo. Las puertas están abiertas para que formes parte de alguno de estos grupos. Haciendo clic en el enlace de cada uno, revisa fechas, objetivos y precios:
Con Otros Ojos – 4ª. Edición: Inicia el 15 de febrero Prevención con “P” de personas – 7ª. Edición: Inicia el 15 de febrero La Aventura de la Crianza – 5ª. Edición: Inicia el 12 de abril. El TransCurso – Edición XXIV: comenzó el 25 de enero. Esta es la primera edición en la que los contenidos están en castellano y catalán, gracias al apoyo de Dipsalut. La próxima edición iniciará el 20 de septiembre de 2021.Con varias escenas de la vida cotidiana tomadas del cine, de la música, de
la literatura y de la prensa iberoamericana, podrás disfrutar mientras te
entrenas en las Habilidades para la Vida y estrenas maneras para relacionarte
con otros seres humanos, otros seres vivos y contigo:
“Es la mejor propuesta pedagógica que he conocido en formato telemático.
No resulta fácil llegar al corazón, al sentido vivencial más íntimo en este
tipo de plataforma, y ustedes lo consiguen. Felicidades por ello!”.
(participante – El TransCurso, Ed. XXIII)
El 31 de mayo terminó la primera cosecha de CON OTROS OJOS, un curso en línea que gestionamos para compartir el aporte que las Habilidades para la Vida podían hacer a la convivencia en el marco del confinamiento por el COVID-19. Fueron 8 semanas en las que, gratuitamente, 60 personas de Costa Rica, Colombia, España y México aprendieron entre sí a estrenar miradas, a fortalecer sus capacidades para adaptarse y transformarse.
De los frutos que han quedado de esta primera cosecha, hoy, está lista la 2ª. Edición de este curso. No solo las personas participantes aprendieron a verse con otros ojos. El curso en sí mismo se dio cuenta que si bien nació como todo un “pandemial”, con tapaboca y en el marco de #yomequedoencasa, su aporte va más allá. Hemos revisado y ajustado algunos aspectos y esta segunda edición tendrá sólo 6 semanas de duración y aportará a gestionar tantas otras situaciones de la vida que aparecen así, de un momento a otro, que nos obligan a empezar de nuevo, a recalcularnos, a cambiar de país, a cambiar de profesión, a quedarnos a solas… Esta segunda edición aporta también a tantas otras situaciones que vivimos, ya no por obligación sino por decisión, que queremos transformar, especialmente en el campo de las relaciones humanas.
Tres historias para asomarnos a los frutos de la primera cosecha
La primera historia corresponde a una promotora de la salud, de 28 años, de Costa Rica que escogió como meta retadora consigo misma, vivir un proceso para aprender a hacer algo que no supiera hacer. Confiaba en que de ello aprendería mucho sobre ella misma y de la manera de enfrentarse a lo desconocido. Decidió sacar a flote una huerta casera, aprender a cultivar y cuidar. En su proceso de siembra contó con el apoyo de un compañero de curso de Colombia. Viendo germinar muy lentamente sus lechugas, chiles y berenjenas pudo observarse a sí misma mejor y descubrir claves para el cuidado de otras personas y de paso, cómo abonar su paciencia y gestionar las frustraciones propias de la vida:
“A pesar de ser un curso virtual, los experimentos me impulsaban a leer más y estar al pendiente de cuál sería el de la siguiente semana. La idea de trabajar 2 HpV en una sola unidad me pareció muy buena porque permitió enlazar y complementar su aplicación. A nivel personal, encontré tranquilidad y la capacidad de aprender a dejar ir lo que no puedo controlar. Es difícil, pero cada día me he prometido seguirlo trabajando”.
La segunda historia es protagonizada por un educador vasco de 41 años: “Tenía una visión muy negra de todo y lo que más me ha sorprendido es que se me ha regalado una valiosísima mirada, “con otros ojos”. He descubierto una amplia gama de grises que solo se consigue con la mezcla sorprendente del blanco y el negro. En muchas de las tareas que había que realizar, mi aita ha sido protagonista. Precisamente por ello he conseguido trabajar muchos aspectos de estas habilidades para la vida junto a él. Me parece increíble y a su vez maravilloso poder verle desde otro punto de vista, más empático, sentirle más como persona que como dictador, quererle más de cerca, observarle sin juzgarle a priori como solía ser costumbre. Supongo que será una tarea difícil, mantener esta situación y mucho más mejorarla, pero como ya he dicho antes, esfuerzo, ganas y pasión… y a por todas, ya que… “Tempus Fugit”… y aita no tengo más que uno”.
La tercera historia la protagoniza una mujer mexicana, psicóloga, de 26 años, que buscaba en diferentes redes y plataformas cursos para seguir formándose en su área profesional: “Mi interés era seguir aprendiendo y seguir adquiriendo conocimientos. No sabía que en este curso iba a ser el objeto de estudio, que la mirada iba a ser hacia mí y hacia las relaciones con las personas con las que convivo. Agradezco cada deleite de lectura y cada comentario que ha enriquecido mi forma de mirar y mi forma de sentir. Sin duda ha repercutido en la manera en que me relaciono con mi familia, especialmente con mi mamá, que fue una de las metas que me propuse al iniciar este curso porque es una persona a la que estimo mucho. Y no ha sido sencillo ni lo será porque juntas vamos aprendiendo a conocernos y a tratarnos de la manera más amable y respetuosa posible”. En nuestra memoria quedan las demás historias del resto de procesos vividos en estos dos meses en los que nos enfocamos en ver la vida y sus desafíos con otros ojos. Son tan diferentes como valiosas. Estas tres han sido solo una muestra de ello.
Abierta la 2ª. Edición
Si desea participar en la 2ª. Edición, el requisito más importante es ser una persona que desea fortalecer su propia capacidad para aprender a mirar la vida con sus más y con sus menos, con sus condiciones de juego siempre cambiantes; que desee entrenarse y aprender con otras personas que no conoce, que viven en otros países; que esté dispuesta a ser su propio “objeto de estudio”; que le interese cultivar su creatividad para romper sus rutinas; que quiera desarrollar su empatía para comprenderse mejor a sí misma y a las otras personas; que desee entrenar una forma de comunicación que le permita expresar mejor sus necesidades y escuchar las ajenas; que pueda dedicarse a la semana las 5 horas que se piden, sabiendo, que la metodología del curso le permitirá profundizar tanto como lo desee y su tiempo se lo permita.
¿Qué es mirar? ¿Para qué otros ojos? Te invitamos a matricularte para responder colectivamente a estas preguntas y desafíos.